9 de noviembre de 2018
Aquellas niñas que reconocimos en fotos, Raúl Quirós Molina
Hace unas semanas Raúl Quirós, autor de la novela, me escribió para pasarme información sobre su última obra y darme la opción de leerla si quería. Tras leer el argumento accedí.
El libro se divide en dos partes muy diferenciadas, ambas protagonizadas por mujeres muy distintas pero ambas con una vida muy dura.
La novela arranca con la muerte de Angustias, madre de Adela, protagonista de la primera historia. Adela ha pasado los últimos años de su vida cuidando de su madre enferma y olvidándose de su propia vida. Es una mujer profesional y con un trabajo fijo pero sin una vida social activa desde hace mucho tiempo. No sólo ha tenido que sacrificarse por el cuidado de su progenitora, también ha aguantado sus humillaciones, reproches y mal carácter.
Tras su muerte vemos como Adela está un poco pérdida. Se siente entre la pena lógica y normal por la pérdida de su madre, el dolor ante la falta de cariño de esta hacía ella y la sensación de vértigo ante su nueva vida.
Teresa, su mejor amiga, es una mujer independiente, sexy y con una vida amorosa bastante activa. Adela anhela poder ser como ella y por ello se mete a una web para poder hablar con gente y conocer hombres. Tras varias citas y muchas decepciones conoce a Honduras, un hombre latinoamericano con muy buenos modales que la escucha y parece preocuparse por ella. Pero está al otro lado del charco. También conoce a Marc, un fotógrafo con el que siente mucha conexión.
Pero tras salir varias veces con su amiga Teresa, Adela comienza a interesarse por su novio David, un hombre atractivo, seductor y dueño de una cadena de gimnasios.
Reconozco que en un primer momento me chocó que Adela se interesara por el novio de su amiga pero cuando ves la forma tan condescendiente en la que ésta la trata, como si Adela fuera poca cosa, una mojigata incapaz de ser tan sensual como ella, comienzas a entender a Adela y sus ansias por conquistar a David y demostrarse que ella es capaz de seducir al hombre que desee.
Lo que en un primer momento es un juego de atracción cambia cuando Adela decide dar por finalizada la relación y él no se lo toma bien. Sale entonces a la luz el verdadero David, un hombre obsesivo, posesivo y violento con el que comienza una relación tóxica y de maltrato.
Me hubiera gustado que el autor continuara un poco más con esta historia y profundizara más en ella. Estaba llevándola muy bien, tratando con mucha cautela el tema pero llegando al lector. Traspasaba la angustia y sobre todo la impotencia antes la situación que estaba viviendo Adela.
Saltamos entonces a la segunda parte de la novela y nos vamos a Brasil. Allí María, una estrella mundial que vive sus últimos días por culpa de un cáncer relatará su historia desde su más tierna infancia.
Conoceremos su niñez en las favelas rodeada de delincuencia, prostitución y abusos a menores.
El sueño de María siempre ha sido ser cantante pero en un entorno como el de ella era muy complicado despuntar, que los grandes se fijaran en ella. Sin embargo jamás cejó en su empeño.
Siendo muy joven abandonó su pueblo con unas amigas prostitutas, pusieron rumbo a la ciudad y allí se vio obligada a trabajar en sitios indeseables. Y una vez más rodeada de prostitución, chantajes y violencia.
No puedo desvelar mucho más porque debe ser el lector quien descubra la conexión entre estas dos mujeres y cómo, pese a los kilómetros que las separaban influyeron una en la vida de la otra.
Como punto negativo sólo puedo destacar el parón tan brusco entre la historia de Adela y la de María. Quizás sea que me hubiera encantado, como ya dije, que siguiera mucho más con la historia de ella y David pero me resultó un cambio demasiado drástico. Me faltó saber cómo se desarrollaba la historia un poco más, como llevaba Adela la situación y conocer cómo se toma Teresa la deslealtad de su amiga.
También debo decir que en un primer momento la vida de María no me interesaba lo más mínimo. Menos mal que muy poco después ya uno va viendo la vida tan dura que ha tenido que pasar para llegar a los más alto de la fama.
Aquellas niñas que reconocimos en fotos narra la vida de dos mujeres que bien podrían ser nuestras vecinas o algún familiar. Historias muy duras, muy complejas pero desgraciadamente demasiado cercanas.
Pese a la crudeza Raúl Quirós ha sabido tratar con mucho tacto los temas más difíciles y ha logrado que quisiera leer cada vez más y más hasta conocer la conexión entre estas dos mujeres.
La novela fue finalista del Premio Nadal de este mismo año y la tenéis en Amazon. Muy recomendable.
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Hola! Coincido contigo en muchas cosas, es cierto yo también me quedé con ganas de saber qué pasaba con Adela y David e incluso con Adela y Marc.. Pero me gustó y está muy bien escrita la verdad. Besos
ResponderEliminarPues no era una novela que me llamase mucho, pero por lo que cuentas, creo que me terminaría gustando. Tomo buena nota.
ResponderEliminarBesotes!!!
Hola!
ResponderEliminarNo conocía este libro y me gustaría leerlo, así que me lo llevo anotado.
Gracias por la reseña.
Besitos :)
Hola! No sabia de este libro pero quitando el punto negativo que comentas podría ser una buena lectura. Lo voy a tener en cuenta para más adelante, en general creo que podría gustarme.
ResponderEliminarBesos!
Hola, conozco la novela, pero por el momento no creo que me anime a leerla, aunque no descarto hacerlo en un futuro.
ResponderEliminarBesos desde Promesas de Amor, nos leemos.