Lo que esconden las olas, Emma Lira

Año 1906. Un trasatlántico italiano navega rumbo a Buenos Aires. Se trata de El Sirio, un elegante y modernísimo barco, en cuyo interior, clérigos, diplomáticos, emigrantes y una bella cupletista española viajan en dirección a ese Nuevo Mundo donde los sueños se pueden hacer realidad. Sin embargo, a solo tres millas de la costa española, el buque naufragará. De manera inexplicable, el capitán se dará a la fuga dejando a bordo un oscuro negocio de inmigración ilegal y una intrincada trama internacional, además de una misteriosa caja fuerte vacía y cientos de pasajeros condenados a la muerte.
Año 2006. En el centenario del naufragio, el joven Sandro llega al pueblo del que jamás se habla en su familia. Viene en busca de las causas de un accidente que quizá nunca fue tal. Paula le introducirá en el rodaje de un documental conmemorativo de la tragedia, sin imaginar que la historia que van a remover tiene mucho que ver con la suya propia. Una desafortunada promesa de honor y una anciana sin memoria, que un siglo atrás viajaba al Nuevo Mundo, arrojarán insospechadas claves sobre ese barco que duerme su sueño eterno a sesenta metros de profundidad.

Plaza & Janés, Mayo 2015         /        544Pág.         /           19.99€

A Emma Lira la conocí con su primera novela Búscame donde nacen los dragos, una novela ambientada en mi isla - Tenerife - y en la que se sumergía de lleno en la vida de nuestros antepasados: los guanches. Me encantó, no sólo porque era una historia cercana y sus personajes caminaran por escenarios en lo que yo transito diariamente, la narración de Lira es perfecta, sencilla y cercana y con una documentación perfecta. 

Es por ello que cuando supe que se embarcaba en un nuevo proyecto no dudé un segundo en darle una oportunidad. En esta ocasión la autora  se hace con la historia de EL Sirio, un barco de pasajeros que navegaba rumbo a Buenos Aires desde Italia, haciendo escala en España, y termina naufragando en la costa de Cartagena. 

La novela transcurre a tres voces. 

Por un lado tenemos la voz del capitán, sus capítulos transcurren durante la navegación en 1906 y tras la tragedia. En ellos viviremos de primera mano la angustia y los remordimientos a los que se ve sometido. El capitán abandona el barco dejando a la tripulación y los pasajeros a su suerte durante el naufragio. Lo hace con el fin de proteger unos papeles muy valiosos pero a partir de ese momento se convertirá en el culpable. El capitán debe ser siempre el último que abandone el barco.

Por otro lado tendremos a los pasajeros del barco contando sus historias mientras navegan en el mismo. Los personajes son muy diferentes: Desde varios sacerdotes, pasando por Candelaria, una cupletista que sueña con triunfar en América. Con ella viajan su mejor amiga y las hijas de ambas, se codean con las mas altas esferas de la gente que viaja en el barco, hasta que Candelaria conoce a un hombre: Enrrico. Este es todo lo contrario a Candelaria, huye del país en un intento de dejar atrás sus antecedentes penales y salvar a su hermana y su sobrina. Pero guarda secretos muy importantes. Cuando conoce a Candelaria se presenta ante él la oportunidad de vivir la vida que cree merecer: lujo, dinero, poder. Pero sin pretenderlo se irá enamorando de esa mujer, intentando que ella no descubra quién es en realidad. 

Los capítulos que transcurren a bordo del barco son muy ricos en documentación ya que aborda a personajes muy distintos y con diferentes aspiraciones y motivaciones para cruzar el charco. Complots políticos, secretos de estado, conspiraciones, y la mayoría, simplemente dejar atrás las penurias y comenzar una nueva vida en América. 

Y por último tendremos capítulos ambientados en la actualidad - año 2006 - que tienen como protagonista a Alessandro. Sandro es el tataranieto del capitán de El sirio. Han pasado muchos años hasta que por fin ha logrado llevar a cabo la investigación sobre la tragedia. Con tal fin se ha trasladado desde su Venezuela natal a Cabos de Palo. Tras el naufragio el nombre del capitán, y por ende el de toda la familia, quedó por los suelos. Como herencia su abuelo le dejó un diario, unos documentos que destapan otra realidad. Sandro está decidido a limpiar el nombre de su abuelo y descubrir qué ocurrió de verdad.

¿El Sirio se hundió por navegar demasiado cerca de la costa? ¿Fue un accidente o un tragedia planeada?, ¿Quién se beneficiaba del accidente?, ¿Qué se intenta esconder tras la muerte de cientos de personas?

Todas estas incógnitas y algunas más son las que se nos plantearan a lo largo de sus más de quinientas

páginas. La novela tiene muchísimos ingrediente y todos ellos perfectos para mantener al lector pegado a sus páginas. No vale sólo con todo lo que os he contado, también tendremos inmigración ilegal a bordo y como el pueblo y sus pescadores se volcaron en salvar, por desgracia, a una pequeña parte de las víctimas inocentes de la catástrofe. Las intrigas políticas también serán un plato fuerte, así como la conspiración para acabar con los reyes de la época.

La novela me ha encantado de principio a fin. No conocía la historia de El Sirio, la mayor catástrofe naviera de España, Emma Lira nos acerca la historia de una manera detallada y con una documentación, para mí, excepcional. Así mismo al final de la historia avisa de los datos reales y de aquellos que son inventados. Ya que jamás se supo qué ocurrió realmente ni el porqué terminó ocurriendo la tragedia. 

La única pega, que no es tal, que podría ponerle a la historia es que al principio es un tanto lenta. Normal puesto que se nos tiene que introducir en los antecedentes tanto en el 1906 como en el 2006. Pero una vez pasado esto la dosis de intriga de la historia hacen que enganche de una manera irremediable. 

Lo que esconden las olas es una historia compleja que intenta descubrir la verdad sobre una catástrofe de magnitudes escalofriantes. Al mismo tiempo que se intenta lavar un nombre y mantener viva la memoria de las víctimas todo ello con el esqueleto de El Sirio bajo las agua de Cartagena y el mar como protagonista indiscutible. Una maravillosa novela.