La casa de la playa, Nora Roberts

Un abogado acusado del asesinato de su mujer se refugia en la casa de la costa de su abuela. Quiere aislarse del mundo, pero los hechos y la determinación de su joven vecina le obligarán a plantearse nuevas preguntas sobre lo que sucedió.

Tengo debilidad por las novelas únicas de Nora Roberts, es decir, aquellas que no pertenecen a ninguna serie. Siempre he pensado que son las que cuentan con más calidad, es por ello que cuando supe de la publicación de esta historia no pude evitar devorarla. 

La casa de la playa tiene como protagonista a Eli Landon, un abogado de éxito y miembro de una de las familias con más renombre de Boston que vio como su vida cambió de forma trágica un año atrás al ser acusado del asesinato de su esposa. A partir de ese momento Eli ha luchado por encontrar al verdadero culpable, limpiar su imagen y despejar todas las dudas sobre su persona. 

Buscando aclarar su mente y descansar del ajetreo de la ciudad Eli se muda  a Bluff House la imponente casa de la playa de su abuela Hester. Allí espera reencontrarse con el hombre que una vez fue, intentar avanzar en el libro que está escribiendo y proseguir con la investigación. Lo que no sabe es que allí se encontrará con Abra Walsh una mujer impetuosa y decidida que conseguirá meterse en su vida y en su corazón sin que apenas el se de cuenta. 

La casa de la playa tiene un trasfondo duro, no sólo por parte de Eli y la acusación de asesinato que pesa sobre sus hombros, también por el pasado traumático de Abra. Eso hace que, como lectora, haya sentido una conexión casi instantánea con ambos, eso es lo que consigue Roberts en la mayoría de sus historias. 

Lo que más llama la atención en un primer momento es Abra. Un mujer joven, decidida y se podría decir que hiperactiva. Abra no pasa un segundo del día quieta, limpia en varias casas del pueblo, entre ellas la de Hester, da clases de Yoga, masajes y es una excelente cocinera. Todos sus talentos los vuelca en Eli, conoce de primera mano su historia y se pone como meta que vuelva a ser el hombre que una vez fue y saque fuerzas para encauzar su vida de nuevo. 

Es imposible no enamorarse un poco de Abra, es una de esas mujeres llenas de bondad y determinación que lo único que hacen en la vida es facilitar un poco el día a día de los demás.

La relación entre Eli y Abra avanza de forma muy pausada y eso es algo que adoro. Roberts los va acercando poco a poco y sin que ambos se den cuenta, en forma de pequeños detalles, pequeños gestos tanto Eli como Abra se van haciendo imprescindibles en la vida del otro. Cuando por fin su relación estalla lo hace de una forma apasionada y arrolladora. 

Por supuesto, como ocurre en algunas novelas de la autora, la relación amorosa es un complemento de la historia. Roberts se centra en la investigación incesante de Eli, con la ayuda de Abra, para buscar al verdadero asesino de su mujer. Al mismo tiempo se cometerá otro asesinato en la playa y todas las dudas recaerán una vez más en Eli. Eso y la búsqueda del Tesoro Esmeralda convertirán a La casa de la playa en una novela llena de amor, amistad y compañerismo pero también de misterio, secretos y viajes al pasado de la familia Landon y a la historia de Bluff House.

Plaza & Janés Febrero 2014        /        528Pág.         /         20.90€