15 de octubre de 2015

Apostando para ganar, Jaci Burton

Jenna Riley ya no sabe cómo desvincularse de los deportes. Mientras sus hermanos Mick y Gavin son estrellas en sus respectivos equipos, a ella le toca ocuparse del negocio familiar...por mucho que le pese. Así que cuando el jugador de hockey sobre el hielo Tyler Anderson la invita a salir, ella lo rechaza. Por muy atraída que se sienta por él, ha jurado no enamorarse de ningún hombre que se gane la vida practicando un deporte.
 Tyler se siente tan intrigado por la propietaria de Riley's que se convierte en cliente habitual. A medida que la confianza y la pasión crecen entre ellos, y consciente de que Jenna quiere reorientar su vida, la insta a vivir cómo anhela. 

Junio 2015 - Phoebe     / 304Pág.      /       17.95€   /                                                Serie: 3º Play by play

En casa de los Riley siempre se ha vivido intensamente el deporte. Tanto Mick como Gavin, los dos hermanos mayores, decidieron dedicarse profesionalmente a ello, uno al Fútbol Americano, otro al Béisbol. Ambos son estrellas pero ¿qué ha sido de Jenna? La hermana pequeña vivió una adolescencia un tanto rebelde y ahora, tras el infarto de su padre, se ha dedicado por entero al negocio familiar: Riley's, un bar orientado totalmente al mundo deportivo. 
Jenna rompe con el estereotipo de mujer que hasta el momento llevaba la serie. Jenna tiene un aire de rebeldía con sus tatuajes, piercings y pelo corto con colores estridentes. Tiene una personalidad diferente y muy marcada y eso es principalmente lo que llama la atención de Ty. Jenna ha decidido, desde hace tiempo, que no quiere una pareja que tenga que ver con el mundo deportivo, considera que tener ese ambiente tanto a nivel familiar como profesional es más que suficiente. Pero las cosas no salen como ella espera. 
La atracción entre Ty y Jenna es patente desde el primer segundo. Creo que es la más explosiva de las tres historias publicadas hasta el momento. Es difícil sentir ese feeling entre una pareja a través de las páginas pero Burton lo consigue.  La compenetración y la tensión sexual se reflejan en cada página de principio a fin de la historia. 
Sin duda, para mí, Burton es una de las mejores autoras en lo que a erótica se refiere. Sus libros están cargados de muchas escenas sexuales, incendiarias, de alto voltaje pero se complementan tan bien con el resto de la historia que no me ocurre, como con otras autoras, que llegan a saturarme y parecerme excesivas y fuera de lugar. Como viene siendo costumbre la familia Riley - padres, hermanos, esposas, hijos - son parte fundamental del desarrollo de esta historia. 
A parte de la relación sentimental y la carrera deportiva de Ty en el hockey sobre hielo, el otro tema fundamental es la vida de Jenna y como desea encaminarla. Es entonces cuando nos daremos cuenta que mientras sus hermanos han vivido la vida que soñaban y fueron apoyados por sus padres desde su más tierna infancia no ocurrió lo mismo con Jenna. Los sueños de Jenna quedaron eclipsados, a mi parecer, por las carreras de sus hermanos. Ty intentará, con mucho esfuerzo y oposición de Jenna, que esta cumpla sus sueños, se reafirme y encamine su vida como realmente desea. 
Y es que nos encontraremos con una Jenna terriblemente terca. En su interior desea avanzar y cumplir sueños pero al mismo tiempo, debajo de toda esa armadura de mujer dura, es una persona con muchos miedos e inseguridades. Miedo a avanzar, miedo a al éxito, miedo a estropear su relación con Ty, miedo a defraudar a sus padres. Es por ello que continuamente intenta imponerse a su corazón, sobre todo con lo referente a Ty. 
Apostando para ganar me ha encantado. Creo que es, hasta el momento, la novela más sensual y explosiva. Un romance maravilloso cargado de dudas y momentos complicados pero en el que sobre todo se puede palpar la pasión, la amistad y un amor maravilloso




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