Faltan unas horas para la medianoche. Por fin, después de varias tentativas, Amalia ha logrado a sus 65 años ver cumplido su sueño: reunir a toda la familia para cenar en Nochevieja. Una madre cuenta la historia de cómo Amalia entreteje con su humor y su entrega particular una red de hilos invisibles con la que une y protege a los suyos, zurciendo los silencios de unos y encauzando el futuro de los otros. Sabe que va a ser una noche intensa, llena de secretos y mentiras, de mucha risa y de confesiones largo tiempo contenidas que por fin estallan para descubrir lo que queda por vivir. Sabe que es el momento de actuar y no está dispuesta a que nada la aparte de su cometido.
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En mi lista de autores pendientes ha estado, desde hace mucho, Alejandro Palomas. Recuerdo ver en blogs las reseñas de sus novelas y pensar que tenía que darle una oportunidad. Parecía el estilo de novelas que me suelen gustar y así ha sido.
Tengo que reconocer que el empujón me lo dio una chica que sigo por Instagram que comenzó a leerlo y me pudo la tentación.
La novela aparentemente se centra en la noche de fin de año. Amelia a sus 65 años ha logrado por fin reunir a su familia. La historia va saltando continuamente de lo que ocurre en su casa esa noche con lo que les ha ocurrido, tanto a ella como a sus hijos, a lo largo de los últimos años.
Fer, hijo de Amalia, es el que nos irá contando la historia de su familia. La vida de sus hermanas, tan distintas pero llenas de altibajos. Su propia vida con sus amores y desamores. Pero sobre todo conoceremos a Amalia, su relación con sus hijos, su desastroso matrimonio y luego divorcio de su marido...
Amalia es el personaje más importante y por ello voy a centrarme más en ella. Estoy segura que todos conocemos a una persona como ella. Amalia parece que vive en los mundos de "yupi", como se suele decir. No se entera de nada, le cuentan algo y tarda muchísimo en entender su verdadero significado (si alguna vez llega a hacerlo), transforma cualquier noticia en la cosa más absurda e ilógica que se pueda ocurrir. Se monta películas increíbles de lo mínimo...Yo me sentí muy identificada con una de sus hijas que no aguanta la actitud de su madre, y aunque la mayor parte del tiempo intenta aceptarla llega un punto donde explota.
Creo que Palomas ha llevado el personaje de Amalia y su hermano al extremo. Son dos personajes que no se enteran de nada, o son demasiado listos. En ciertos momentos reconozco que llegaron a saturarme pero el autor dota de tanto humor a estas situaciones que al final es entrañable.
Todos los personajes que aparecen en la historia son diametralmente opuestos pero les uno el cariño y el amor por su familia. Las ganas de forjar aún más ese lazo, sobre todo con su madre. Una mujer que daría cualquier cosa por sus hijos y que, bajo esa fachada de ingenuidad, comprende y apoya a los suyos incondicionalmente.
Una madre es una historia que habla de la vida. De la familia. De las cosas que pueden suceder en cualquier casa y como una familia se enfrenta a ellas. De la unión y el distanciamiento, de las máscaras, del miedo, de la esperanza y las segundas oportunidades y todo ello aderezado con mucho humor. Me ha gustado muchísimo el estilo de Palomas y creo que repetiré.
