Implacable y brillante, Vishous, hijo del Sanguinario, se encuentra bajo la influencia de una maldición y una aterradora habilidad para ver el futuro. Antes de su transformación, creció en el campo de batalla de su padre en el que sufrió abusos y estuvo constantemente atormentado. Como miembro de la Hermandad, no tiene ningún interés en el amor o en los sentimientos, solo piensa en la lucha contra la Sociedad Restrictora, pero una herida mortal le deja bajo el cuidado de una enfermera humana, la doctora Jane Whitcomb. Ella le obligará a revelar su dolor interior y a saborear el auténtico placer por primera vez, hasta que el destino lo elige para mandarlo a un futuro que no la incluye a ella...
Debolsillo 2015 / 569Pág. / 9.95€ Serie: V, La Hermandad de la Daga Negra
El género paranormal no es precisamente mi favorito dentro de la romántica. Pero, como toda lectora del género sabe, hay dos serie que te recomendarán hasta la saciedad y que sería terrible, casi un pecado mortal, no leer. Hablo, por supuesto, de los Dark Hunter en el caso de Kenyon y de la Hermdad de la Daga Negra en el de J. R. Ward.
Tengo comenzadas ambas series y ambas también fueron abandonadas, hace años, exactamente en el mismo libro, en el cuarto. Para no irme por las nubes comentaré sólo el tema que nos atañe hoy, La Hermandad. Los dos primeros libros de la novela me encantaron, se convirtieron prácticamente en una obsesión para mí, no podía pensar en otra cosa. Llegué a Z y reconozco que tan altas expectativas - toda fan de Ward dirá que Z es el mejor protagonista de TODA la novela romántica - hicieron que el libro no me resultara nada excepcional. Llegamos a Butch y eso fue una caída en picado. La conclusión fue que Ward se pegó una castaña de campeonato.
Ahí acabó mi relación con Ward, pese a que me insistieron mucho, si, el libro de Butch es infumable pero la serie mejora.
Pues hala, años después aquí estoy con Amante desatado.
V - Vishous, un personaje más que conocido durante los anteriores libros, sobre todo en el caso de Butch. Reconozco que es, quizás, de los miembros de la Hermandad el que menos me llamaba la atención pero en este libro lo he re-descubierto.
V es el hijo de el Sanguinario, un ser conocido por su crueldad, pero no se sabe nada de su madre. Por fin en esta novela sabremos de una vez quién es su progenitora, al tiempo que, mediante fragmentos, Vishous nos mostrará el dolor, humillación y crueldad que sufrió al lado de su padre en el campo de batalla. Una situación que acabó con una maldición terrible sobre él.
En la actualidad V es miembro de La Hermandad y se dedica con ahínco a luchar contra los Restrictores y a cuidar de los suyos. No quiere saber nada del amor - todos sabemos de su relación frustrada que la autora no tuvo valor para sacar adelante como debería- pero todo cambia cuando es herido gravemente y acaba siendo hospitalizado y atendido por Jane.
Aquí comienza la lucha interna de Vishous. Sabe que no puede ser pero los sentimientos que comienza a sentir por la humana son tan fuertes que arrasan todo lo demás.
Ambos protagonistas son muy fuertes. Jane para ser humana alejada de todo el mundo oculto que la rodea se toma bastante bien la situación e incluso intenta sacar provecho de ella. Pero si es cierto que su relación con V me resultó, no se si decir, precipitada o que la autora se centró más en otros aspectos de la historia.
Por un lado agradezco que Ward dejara un poco de lado en esta novela las batallas con sus archienemigos Los Restrictores, pues la saturación de este elemento fue una de mis quejas de las anteriores novelas. Lo que le hace ganar muchos puntos es la continua alusión a otras historias y secundarios de la serie. Me ha encantado reencontrarme con John - estoy deseando llegar a su libro - y ver como va creciendo y pese a sus limitaciones intenta convertirse en un miembro más de la Hermandad.
Wrath, Rhage (mi favorito) y sus parejas así como otros miembros serán participes de la historia pero si me tengo que quedar con alguien será con Phury. El hermano de Z vive una situación límite que, aunque ya conocida, se vive aún con más intensidad en esta historia, como antesala de la próxima, la suya propia: Amante Consagrado.
En la novela el principal protagonista es V sin lugar a dudas. Sus vivencias, todo a lo que ha tenido que renunciar por culpa de su padre, a lo que debe renunciar en la actualidad por cumplir con su papel dentro de su mundo. El dolor, la traición y sobre todo la soledad que lo ha acompañado toda su vida serán la base para conocer a este personaje y en Jane descubrir a un nuevo Vishous, un hombre con ganas de enamorarse y ser feliz. El final de la historia me sobrecogió y emocionó bastante.
A pesar de los años transcurridos he vuelto a sentir esa especie de fiebre de la Daga Negra. Ya mismo estoy con la novela de Phury y se que ya esto será un no parar hasta llegar por donde van en la actualidad. Vienen por delante personajes a los que le tenía muchas ganas y sobre todo uno que me rompió el corazón en su momento: Tohrment.
En fin, por si no ha quedado claro más que recomendada su lectura. Para los que aún no hayáis catado a Ward estáis tardado, más ahora que Debolsillo ha reeditado la serie entera.
