20 de diciembre de 2013

Calle Dublín, Samantha Young



Cuatro años atrás, Jocelyn Butler dijo adiós a su trágico pasado en Estados Unidos para empezar una nueva vida en Edimburgo. Pero cuando se muda a un apartamento en Dublin Street y conoce al hermano mayor de su compañera de piso, todo cuanto ha intentado proteger se ve sacudido hasta lo más profundo. Braden Carmichael es un hombre que siempre consigue lo que quiere, y ahora la quiere a ella.
Sabedor de que Jocelyn ha renunciado a establecer cualquier clase de relación, le propone dar rienda suelta a la intensa atracción que siente el uno por el otro, sin dejar que la relación vaya más allá del sexo. Jocelyn acepta, sin imaginar que el atractivo escocés se enamorará de ella sin remedio.

¿Qué puedo decir de Calle Dublín que ya no sepáis? Es una novela que tenía pendiente desde que salió pero, como siempre, cuando comienzo a ver muchas reseñas de la misma novela me saturo y prefiero esperar a que pase un tiempo. Finalmente la semana pasada, en una de esas tardes de intensa tormenta que hemos tenido por las Canarias, me dio por comenzarlo y me he enamorado. 

Calle Dublín comienza con la tragedia ocurrida en la familia de Jocelyn, una tragedia que truca su adolescencia y la marca de por vida. Jocelyn se convierte en una mujer, aún con amigos, profundamente distante y celosa de su intimidad, no confía en nadie simplemente porque no confía en que nadie se quede suficientemente tiempo en su vida. 

Ahora Jocelyn ha llegado a Edimburgo para comenzar su nueva vida. Allí compartirá piso con Ellie y conocerá a Braden hermano de esta que pondrá su mundo patas arriba. 

La relación entre Braden y Ellie está cargada de tensión sexual desde el minuto uno pero lo que prima en la historia son los sentimientos. La autora narra de forma excepcional como, poco a poco, va avanzando la relación en medio de desconfianzas, discusiones y reconciliaciones se va afianzando una relación solida. 

A pesar del gran papel de Braden para mi la protagonista indiscutible de la historia es Jocelyn. Por la carga psicológica y emocional que lleva arrastrando años, por la falta de confianza y seguridad en si misma, descubrir a Jocelyn a lo largo de la historia ha sido un placer, y por supuesto ver como sus sentimientos y los de Braden pasan del deseo a un amor maravilloso. 

Eso si, Braden es uno de los mejores protagonistas masculinos que he leído en mucho tiempo. Un hombre atractivo, inteligente y al mismo tiempo divertido y picaro. Braden tiene un gran sentido de la lealtad y de la familia a la que quiere y protege por encima de todo. Esa protección se traslada a Jocelyn en el momento en que sus sentimientos crecen y se da cuenta que vale la pena luchar por ella. 

Por si todo lo ya comentado fuera poco Young nos presenta a uno secundarios de lujo. Ellie y Adam protagonizaran una historia de amor secundaria cargada de malos entendidos y una grave situación por la que pasará Ellie. 


Calle Dublín es de esas novelas que llegan al corazón desde la primera página, de las novelas de "antes", de aquellas que te hacen latir el corazón de forma desbocada, de las que no puedes separarte hasta que has acabado y de aquellas que cuando cierras su última página lo haces emocionada y entristecida. En definitiva Calle Dublín es de esas novelas que te roban el corazón. 
La mejor novela romántica que he leído este 2013 sin lugar a dudas. 



Ediciones B, 2013        /        368Pág.       /      17€

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