Título: Un lugar donde refugiarse
Autor: Nicholas Sparks
Editorial: Roca
Publicación: Octubre 2011
350 Pág.
19€
Argumento:Cuando Katie aparece en la pequeña localidad de Southport, en Carolina del Norte, su precipitada llegada provoca muchas preguntas sobre su pasado. Katie es hermosa pero no le gusta lucirse y tiene una determinación obstinada por evitar cualquier relación demasiado personal hasta que una serie de desafortunados sucesos la obligan a establecer ciertos lazos: uno con Alex, un viudo propietario del colmado del pueblo y que tiene dos hijos pequeños y un gran corazón; el otro, con Jo, su soltera y muy franca vecina. Poco a poco, Katie irá dejando caer sus barreras, echando raíces en la comunidad y acercándose cada vez más a Alex y su familia.
Pero Katie no puede dejar enterrado el oscuro secreto que oculta su pasado y que todavía la persigue y la aterroriza. Un pasado que la obligó a emprender un viaje a través del país. Katie acabará por darse cuenta de que debe escoger entre una vida segura pero carente de emociones y otra que aun siendo más arriesgada puede darle mucha felicidad…
Valoración:
Siendo seguidora incondicional, como soy, de
Nicholas Sparks si algo me ha sorprendido en sus últimas novelas es que haya
dejado de lado su “vena dramática”. Me encantan sus libros sea cual sea la
historia, pero no negaré que antes significaban para mi lágrimas aseguradas,
ahora al menos en sus tres últimas publicaciones no ha sido así. En ellas he
encontrado tramas duras, si, pero muy alejadas del dramatismo propio del
autor.
En Un lugar donde refugiarse nos encontramos con
eso, una historia dura, se trata un tema muy delicado y crudo pero el autor no se ensaña con ello. Nos lo cuenta de una manera muy cuidada y real que en cierta manera consigue que yo, como lector, logre sentirme identificada con la protagonista.
Katie esmujer que vive permanentemente asustada y aislada de
la gente que poco a poco tiene que irse habituando a la vida de un pueblo
pequeño: conocer gente, hablar con ellos, relacionarse al fin y al
cabo.
Es por ello que conoce a Alex, un joven padre que
debe ocuparse solo de sus dos hijos pequeños.
En los primeros capítulos podremos dilucidar qué es
lo que esconde el pasado de Katie. Que es aquello que la atormenta día y noche y
le impide ser feliz. La cercanía de Alex y los sentimientos que este despierta
en ella serán una fuente más de confusión en a vida de Katie que deberá
plantearse seguir aislada o apostar por ser feliz.
Secundarios realmente importantes hay pocos en la
novela, la más llamativa sea quizás Jo, la vecina de Katie. La relación con esta
es entrañable y la parte final del libro respecto a ellas sumamente emotiva y ,
al menos para mi, sorprendente.
Los hijos de Alex son parte primordial en la
historia, con ellos tendremos escenas entrañables, tiernas y
divertidas.
No se si es que ya no soy nada objetiva con Sparks
pero a mi una vez más me ha enamorado. No es una de sus mejores novelas, eso
está claro, pero como siempre ha logrado darle su toque. Una novela sencilla,
con un trasfondo trágico y duro. Unos personajes carismáticos de los que
es imposible no enamorarse y una narración cuidada y cercana.
Recomendadísima lectura para los seguidores de Sparks y para quienes quieran disfrutar de una novela sencilla y entrañable.
