29 de agosto de 2011

Lo que dure la eternidad, Nieves Hidalgo.


Título: Lo que dure la eternidad.
Autora: Nieves Hidalgo.
Editorial: Zeta Bolsillo (Ediciones B).
Fecha de publicación: Junio 2011.
ISBN: 978-84-9872-529-2.


La noche del 22 de Diciembre del año 1535 algo terrible sucedió en el castillo de Killmarnock, lugar donde se guarda la sandalia que perteneció a Jesucristo. Augustus, conde de Killmar, tuvo que presenciar cómo su mayor enemigo, James de Hibern, asesinaba a dos de sus hijos y le hería de muerte. Si su primogénito Dargo hubiera acudido a tiempo con refuerzos, en vez de estar retozando con toda mujer que se interpusiera en su camino, quizá, sólo quizá, hubieran podido salvarse. Pero Dargo llegó muy tarde, justo antes de que su padre expirase y le lanzase una maldición: el alma del joven no descansaría hasta que encontrase la reliquia y alguien diese su vida por él.
En el año 2004 Cristina Ríos, experta en la tasación de obras de arte, viaja al castillo de Killmarnock para realizar un estudio de todas las pinturas que éste contiene. Una vez allí, escucha escéptica, la leyenda del lugar: el castillo está encantado y un fantasma vaga entre sus muros. Lo que nunca imaginó es que muy pronto iba a descubrir que esa increíble historia era cierta y que terminaría enamorándose del espectro.

Me encantan las reediciones de Zeta, no lo puedo evitar. Cada vez que veo los avances del catalogo editorial y leo: Johanna Lindsey, Lisa Kleypas, Lavyrle Spencer, me dan ganas de gritar de alegría. Reconozco que con esta novela he suspirado y con resignación he decidido releer una novela que en su momento me decepcionó bastante.


Las novelas ambientadas en Irlanda siempre me emocionan. Una cultura llena de supersticiones, leyendas y criaturas fantásticas, donde en cada castillo habita un fantasma con su propia historia, como Dargo.

Cristina Ríos, decide aceptar un trabajo que la alejará de su tierra. Viaja a Irlanda para tasar unas obras de arte, y hacer un estudio de las mismas. Entre las viejas reliquias desempolvará también las viejas historias que se esconden en el castillo de Killmarnock, y que hablan de grandes riquezas, reliquias, pero sobre todo del condenado hijo de Augustus, conde de Killmar, Dargo, y del triste destino al que fue destinado debido a la ira de su propio padre.

El argumento es muy atrayente y tiene todos los ingredientes para lograr atraparnos, sin embargo conmigo no lo logra. No es la narración de Nieves Hidalgo lo que me repele, la verdad es que tengo que decir que la obra es bastante amena y entretenida.... pero hay varios detalles que no me terminan de convencer, entre los cuales destacaré uno.

La relación entre un fantasma y una mortal no es sencilla, ni fácil, mucho menos cuando estos dos se van juntos a la cama. Nunca he sabido a ciencia cierta si las escenas sexuales ocurrían realmente, mientras Dargo se volvia corpóreo a conveniencia, o bien, si por el contrario sucedían solamente en la calenturienta mente de Cristina.

Sé que debe de ser difícil establecer los límites en una relación de este estilo, y sé que con varios libros de Christine Feehan se me presentó el mismo problema, pero es algo que me descoloca y que entorpece mi lectura gravemente.

Para mí es una novela para pasar el rato, punto y final. Tengo ganas de leer otras novelas de Nieves, ya que está fue la primera, o una de sus primeras obras, y aquí ya se la ve despuntar, aunque a mí no haya llegado a enamorarme.


Visita la web de la autora: http://nieveshidalgo.blogspot.com/

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