Título: La cosa más dulce
Autora: Laura Lee Guhrke
Editorial: Esencia
Fecha de publicación: Noviembre 2010
Nº de páginas: 286
Serie: 3º libro de Las chicas de
Little Russell
Argumento:
Han pasado doce años, doce años desde
que el marqués Phillip Hawthorne decidió tomar las riendas de la
vida de su hermano menor William y echar por tierra el matrimonio que
este pretendía contraer con María, la hija del cocinero.
Para ello amenazó a su hermano con
quitarle la herencia y a María la sobornó con una cantidad de
dinero imposible de rechazar para un joven que recientemente se había
quedado sola en el mundo.
Juraron que sus caminos no volvería a
cruzarse jamás y después de tanto tiempo parecía imposible...
María siempre ha querido ser pastelera
y gracias a las amigas que tiene entre la alta sociedad logra
alquilar una tienda en una de las mejores calles de Londres. Lo que
la joven no espera es que su vecino sea Phillip.
Phillip nunca esperó volver a ver a
María, no confía en ella y es por ello que decide arruinar sus
sueños. Pero María se juró que jamás volvería a dejar que el
marqués gobernara su vida.
Aunque le cueste reconocerlo Phillip
sabe que María siempre ha sido su punto débil, una tentación
imposible de resistir.
Valoración:
El día antes de reyes me llegó por
sorpresa un paquete que tenía como misión aliviar mi convalecencia
post-operatoria de parte de una reina maga muy particular xD
Dentro veía este libro, el último
publicado por una de mis autoras favoritas, así que como ya
imaginareis me encantó el regalo! ¡Gracias!
En la cosa más dulce me he encontrado
con una historia de amor preciosa, sencilla y de una u otra forma
original. ¿Por qué?
Bueno, en las novelas históricas
alguna que otra vez nos hemos encontrado con protagonistas
perteneciente a la nobleza que se enamoran de un/a empleado/a, pero
siempre aparece un pasado oculto que convierte a este/a en un miembro
de la alta sociedad lo que hace posible el matrimonio sin escándalos.
En este caso no es así y de ahí viene
mi sorpresa. María es la hija de un simple cocinero y su máxima
aspiración es ser pastelera. Pero, ¿puede casarse un marqués con
unas pastelera?
Ambos protagonistas son maravillosos,
aunque Phillip es muy terco en su idea de fastidiar a María a pesar
que toda su animadversión viene por el deseo que siente hacia ella.
Y María permanece firme en su idea de cumplir su sueño y sobre todo
no permitir que el marqués vuelva a gobernar su vida.
Nos encontramos con una continua lucha
de voluntades y sentimientos encontrados que a mí personalmente me
han encantado. Sobre todo ver como Phillip tan terco, estirado y snob
es poco a poco desarmado por la frescura de María.
Como siempre Guhrke se caracteriza por
la sencillez, no hay grandes tramas, solo una historia de amor
preciosa donde nos demuestra que las apariencias engañan, que las
normas sociales no sirven de nada y que el amor es capaz de vencer
cualquier barrera.
La única pega que le podría poner es
la escasez de páginas, ¡Ni siquiera llegan a 300!, cuando un libro
te encanta quieres que dure y que dure y este se me pasó demasiado
pronto.
Dácil
