16 de noviembre de 2010

Cada siete olas, Daniel Glattauer.


Título: Cada siete olas.
Autor: Daniel Glattauer.
Editorial: Alfaguara.
Serie: 2º parte de "Contra el viento del norte".
Precio: 17.50 €.
ISBN: 9788420406398.

 
Después de un largo letargo, de un período de somnolencia profunda, provocada por autores y novelas que no lograban captar mí interés, he logrado despertar. Incluso me atrevería a decir que a renacer, pues hacía tiempo que no me sentía tan viva.
 
He sufrido en mis propias carnes todos los estados de ánimo de los protagonistas.
 
Me he adentrado en el armario emocional de Leo Leike, y cuando he logrado encontrar la salida, lo he hecho confusa y compungida.
 
He revisado el correo privado de Emmi, y he compadecido a su pobre terapeuta, sufridora en primera persona de sus constantes cambios de humor.
 
He vivido esta lectura como si fuese parte de ella, porque en cierto modo, esos son mis sentimientos, yo creo que esta pareja es algo mío, mejor dicho nuestro.
Y al final, cuando me encotraba exhausta después de tanta tensión, me he sentado en la orilla de la playa, esperando a que llegase la séptima ola.


Llamar a esta parrafada crítica sería insultarnos mutuamente, a vuestra inteligencia y a mí. Igual que me sucedía meses atrás con la primera entrega de Glattauer, Contra el viento del norte, no creo que sea una novela para resumir, argumentar o contar, simplemente es una obra de arte que hay que apreciar por uno mismo, para poder entender. Es por ello, que cualquier cosa que desvelemos de ella solo perjudicará su posterior lectura, y por eso me gustó siempre más la sinopsis de la primera novela.



Sé que mucha gente cree que esta serie tuvo su fin con la primera parte, y que esta segunda solo nació por un fin comercial, o por un afán del escritor de agradar a sus románticos lectores, entre los que me incluyo. No lo puedo decir a ciencia cierta, pero si estas fueron sus motivaciones, ya que a él le gustaba su primer final, nunca un autor obligado a escribir en contra de sus sentimientos estuvo tan acertado. Cada siete olas ha sido el broche perfecto para estas novelas, y una vez más he visto a este autor derrochar magia e ingenio, a la hora de transmitir mil y un sentimientos con pocas palabras, comillas, puntos y exclamaciones.


Una vez terminada la espera, la emoción y las ansias de conocer este esperado final, lo me quedará rozar el punto de contacto en la palma de mi mano, y pensar que Leo y Emmi siempre estarán conmigo vaya a dónde vaya.

Bea

 

© Pasajes Románticos, AllRightsReserved.

Designed by ScreenWritersArena