18 de mayo de 2010

Me casé con un pirata, Samantha David.

Datos del libro:
Título: Me casé con un pirata
Autora: Samantha David

Editorial: Lacoonte
Fecha de publicación: Abril 2010
Nº de páginas: 267
PVP: 17 €



Siempre he sido fan de Gordo Cabrón. Si, como lo oís. El personaje quizá más rastrero de todo Austin Powers. Recordáis la célebre frase del Dr Maligno:


“Lo llamamos “GORDO CABRÓN”, para que no se de cuenta que nos cae mal”.

Pues si era sencillamente así, un tío gordo y desagradable a la vista, con la boca más sucia que he visto en mi vida, por la que “soltaba” auténtica diarrea verbal.
Si, lo reconozco me gustaba, pero no me atraía sexualmente, y es ahí donde comenzarán mis problemas con esta historia.



Me case con un pirata.


Un paisaje Caribeño: palmeras, sol, playa y ...un portátil, cuál postal veraniega, daba paso a una novela de lo más extraña.


Reconozco que compre el libro dejándome llevar por un impulso irresistible. Esa portada, sumada a una reseña como esta:



Querida Philippa:

¿Recibiste mi mail? Un poco largo, perdona. Tuve que extenderme para contarte con todo detalle lo que pasó, para que así puedas entenderme.

Como habrás podido comprobar, me casé con un pirata, pero no un corsario varonil, decidido, fuerte y en el fondo buen hombre, como aparecían en las  películas antiguas; no, un pirata de los de ahora, que no asaltan barcos, ni tienen mujeres en cada puerto (bueno, de esto último no estoy tan segura), pero que conservan todo lo malo y despreciable de un auténtico pirata.
....Me atrapó.


Es bueno poder empezar una novela de la que nunca he oído hablar. De la que no conozco a su autora o editorial; por la que no tengo ningún tipo de expectativa que pueda derrumbarse a lo largo de esta lectura, quizá ese haya sido el ingrediente por la que me ha gustado tanto. A parte de que se ve que a Camilla le gusta escribir mails interminables, que más parecen novelas, como a moi.


Pirata no era James Mallory, era el “GORDO CABRÓN”, sucio, desaliñado, gordo, calvo, con los dientes amarillos y manchas en la piel producidas por el alcoholismo. Déspota, malhablado, acosador y secuestrador, eso era el muy mamón.

Sí esta crítica no tiene tabús, ni palabras finas, si no la pueden leer porqué les hace daño a la vista, mejor no cojan la novela, ya que como les digo, nuestro amigo PIRATA, tiene la lengua muy sucia.


Bueno para otro tipo de lector que el protagonista no sea un desecho de virtudes puede ser normal. La romántica no acostumbra a eso. No. Nosotras estamos acostumbradas a soñar con protas guapos. Si tienen cicatrices da igual, (acaso, no llevo pensando toda la vida que Zsadist, se parece a Vin Diesel). Pero el caso es que tienen cualidades. A Pirata no hay por dónde cogerlo.


Llevo una semanita de verdad les digo de lo más extraña en cuanto a protagonistas se refiere. He pasado de enamorarme de un puñetero dibujo animado. Si, no lo entiendo pero los japoneses son especialistas en volverte sexy a un ser de papel. Da igual que tenga el pelo azul, esté cubierto de piercings, o sea más ambiguo que el mismísimo David Bowie, te acaba enamorando… pero no, ese no era el caso. En esta ocasión la cosa ha sido peor.. o quién lo diría, mejor.


No me gusta el chick-lit, salvo “salvas excepciones”, valga la redundancia, pero en esta ocasión los desvaríos de Camilla, (si, lo reconozco es como mi alma gemela), me han encantado.


Su vida, de madre soltera disparatada y desastrosa, su amor cibernético, ese guaperas que conoció por la red, que resulto ser en realidad el más guarrete de los sapos del pantano. Su relación con él, sus interacciones, discusiones, sus peleas a insulto limpio… me hicieron partirme de risa, ¿Qué digo partirme? Llorar de risa, como pocas veces.


No se los recomiendo. No me atrevo. Dudo que a mucha gente “normal”, le pueda llegar a simpatizar una historia como esta. Pero si lo veis como un cabrón, como el gordo que yo les he pintado, quizás logréis cogerle el punto a la historia, y disfrutar de una novela totalmente original y novedosa.


De verdad, no creo que se la pueda catalogar de Novela Romántica, pese a existir una historia de amor. Es diferente, fresca, y divertida, por lo menos para mi tosco paladar.


En fin… Pirata es un anti-héroe, aunque quizá logremos ver unas similitudes con ellos si miramos a fondo, es malvado, pero leal; posesivo y dominante, pero protector; y por último y no menos importante, es una fiera en la cama, jajajaja. No quería dejarlas en la ignorancia, después de todo.


Me he divertido muchísimo con esta primera novela de Samantha David, a la que no conocía, pero que seguro que investigaré más adelante.


Muchos besos.


Bea.

© Pasajes Románticos, AllRightsReserved.

Designed by ScreenWritersArena