Datos del libro:
Título: Sombras en el crepúsculo (Shades of Twilight)
Autor: Linda Howard.
Serie: Independiente.
Editorial: Titania.
Publicación: Abril 2010.
ISBN: 9788496711839.
Sombras en el crepúsculo, narrará la enrevesada historia de la familia Davencourt.
Una familia muy adinerada, de gente bien. El modelo a seguir de la sociedad. Influyentes, elegantes, guapos y pulcros en apariencia, pero evidentemente “no es oro todo lo que reluce”. El núcleo de esta familia, está lleno de intrigas, penas, sufrimiento y violencia. Nuestros protagonistas vivirán entre celos, infidelidades, incestos, drogas, abusos, e incluso muerte.
Si tenemos un buen cóctel. Todos los ingredientes para otorgar al suspense todo tipo de tintes oscuros y profundamente morbosos. Yo como buena morbosa, valga la redundancia, no pude apartar mi vista de la lectura, y devoré con avidez cada página, mientras un nudo de expectación apretaba mi estomago.
Viviremos la vida de nuestros protagonistas desde que eran poco más que niños. Veremos cómo nuestros primos, Roanna, Jessie y Webb, serán criados por la abuela Davencourt, la matriarca de la familia. Pero como desde pequeños serán diferentes:
Jessie, la hija bastarda. Despiadada y malcriada, hará de Roanna, su diana personal. Será la Princesa Davencourt. Perfección por fuera, pero estará podrida por dentro.
Webb TAllart, no es un Davencourt, pero se cria como si lo fuera, sobrino de la abuela, se cria dirigiendo los negocios de la abuela, y sueña con heredar todas las propiedades, y con casarse con Jessie. Con eso, no solo heredará, si no que logrará domesticar a esa gata salvaje.
Roanna, inquieta, alegre y con un profundo amor por los caballos, no parecía una señorita. Flaca como un palo, siempre sucia y despeinada, era la cruz de su abuela, y el blanco de las maldades de su prima. Su único apoyo en el mundo y su amor platónico era su primo mayor, Webb.
Iban creciendo, Webb consiguiendo sus propósitos, se había casado con Jessie, y estaba predispuesto que algún día fueran los dueños de las propiedades, junto con su prima Ro.
Roanna por su parte, pasaba la mayor parte del tiempo ayudando en los establos, suspirando por Webb, mientras esquivaba a la odiosa de su esposa, su prima.
Como veis nada había cambiado desde que fueran niños, hasta el día en que Jessie murió, y las vidas de nuestros protagonistas quedaron separadas.
No les puedo contar ni un solo detalle más a partir de ahí, ya que sería revelar demasiado de la trama.
La novela continuará diez años después, cuando la abuela se encuentra débil… Cuando Ro, es adulta, formal y llena de responsabilidades, y más aún, cuando los caminos de Roanna y Webb se vuelven a unir.
La novela lo tiene todo, como ya he dicho, la mezcla perfecta. No es de las novelas más eróticas de Linda Howard. Son pocas las escenas sexuales, y no muy explicitas, pero no importa, las escenas son calientes, la tensión palpable, y muchas veces es mejor lo que se deja entrever, lo que podemos imaginar, que la realidad de los actos en si mismos.
No es un libro con humor, aunque me haya arrancado alguna sonrisilla. Si tuviese que resumir la novela en una palabra, la catalogaría como también he dicho (hoy me estoy repitiendo), es como: Morbosa.
Me ha gustado mucho, aunque le tengo que poner alguna pega:
Una prota virgen a los veintisiete años, mi edad, un poco demasiado increíble.. Su relación con Webb después de diez años sin verse, precipitada y un tanto fulminante, creíble solo en el contexto de una novela romántica, pero de resto una genialidad.
La verdad es que en esta novela he vuelto a apreciar a la Linda Howard de siempre, la que con sus primeras novelas, “Secretos en la noche”, “Juego de sombras”, “Amor y venganza” o “El hombre perfecto”, me enamoró irremediablemente.
Ha sido refrescante, ya que no reconocía a ésta, una de mis autoras favoritas, en sus últimas publicaciones. “Al amparo de la noche”, fue para mí como sentir nauseas, si bien me la leí, no la acabe de digerir, y durante toda esa lectura mediocre, me sentí mal y profundamente estafada. Lo mismo me sucedió, con “Cercano y peligroso”, una novela que prometía mucho, una de las secuelas de “Lecciones privadas”, una novela que había disfrutado profundamente. Que no sólo me pareció “de saldo”, de poca categoría, sino que además tuvo puntos que rallaban lo ridículo. En una situación extrema, un accidente de avión, sin comida, agua, ropa de abrigo, entre otras muchas carencias, nuestro protagonista lo que si tenía era: en el momento adecuado un preservativo…. Anda y que le den… un hecho insignificante que me fastidió la lectura… que cosa más absurda.
En fin, que ya me fui por los laureles, ha sido un placer redescubrir a Linda Howard, a la de sus primeras novelas. Ver que todavía le quedan argumentos y tramas que narrar, pero de calidad, y que sigue siendo un genio, mezclando el suspense y la intriga, con la pasión, el deseo y el morbo en todas sus fases, desde el más oscuro y negro, al más erótico.
Les recomiendo esta lectura. No le he dado las cinco plumas, no por qué pensara que no las merecía, ni mucho menos, si no porque considero que en su haber tiene novelas que rozan la perfección en “suspense romántico”, y que esta novela está cerca, pero Webb, aunque lo intenta es incapaz de igualar a Gray, Medina o Sam… mmmmmmmmmmmm.
Bea, pasajes-románticos.
