Título: Claro de luna, Carolina Moon.
Autor: Nora Roberts
Serie: Independiente.
Editorial: Plaza & Janes, DE BOLSILLO
Publicación: Febrero 2002.
ISBN: 978-84-01-32915-9
Y la atleta número 2 a la pista… saltándose otra vez a la torera el horario semanal, hoy les presentaré……. Claro de luna.
Tory siente que es hora de volver al hogar. Al único que ha conocido en su vida, aunque esto sea recuerdo constante del suceso que marcó su vida para siempre, la brutal muerte de su única y mejor amiga de la infancia, Hope Lavelle.
Ella nació en Progress, vivió en la pobreza, y lo hizo siempre bajo los maltratos y abusos de su padre y la aparente indiferencia a estos de su madre. Ahora se siente fuerte y cree que es hora de vencer a sus temores y regresar para poder crearse un futuro cerca de la poca familia que le queda. Quizás los motivos ocultos que la mueven sean otros, que ni siquiera ella entiende aún.
Cade Lavelle era el hermano mayor de la difunta Hope. Se ha hecho cargo de la mansión y fincas de su familia desde la muerte de su padre. Criado y educado con el único fin de ser el heredero de la plantación, sus iniciativas agrícolas no le gustan a todo el mundo, y vive un poco agobiado con tanta crítica, “La agricultura biológica” es una amenaza a todas sus costumbres. (Ignorantes).
Lo que este “granjero”, como a sí mismo se denomina, no se espera, es que su mundo se vaya a volver del revés cuando Tory con sus ojos grises y tristes, vuelva al pueblo con la intención de montar una tienda de “Cosas bonitas”.
Otra vez Nora Roberts, se ha superado a sí misma. Carolina Moon será una historia, llena de frustraciones y dolor, con tintes paranormales.
Nuestra Tory desde muy pequeña, sabe cosas que no debería saber. Donde se encuentran los objetos perdidos, o que han asesinado a su mejor amiga y donde está el cadáver.
Descubriremos a dos personas procedentes de los dos extremos de la escala social.
Veremos como Cade, adinerado y niño mimado de su papá (si “padres” en plural miento), y Tory que solo ha recibido golpes y vejaciones por parte de los suyos y que ha tenido que fabricarse a sí misma y luchar por todo lo que ha conseguido, desarrollan un vínculo irrompible, el que fue forjado el día que los dos perdieron a Hope. Para bien o para mal, ese hecho los une.
Este libro en su primer momento me recordó muchísimo a “Secretos en la noche” de Linda Howard. Sobre todo por “Las víboras”, ósea las madres de nuestros protas.
Las dos sufren el mismo mal: mujeres estiradas que se casaron por posición y dinero. Mujeres igual de frías en la cama que un pescado y que su marido por ello se busco a otra amante más dispuesta (nunca me imagine justificando cuernos.. pero es que estas tipas son insoportables). Culpan de la muerte de sus seres queridos a la protagonista, que en ambos casos no era más que una niña inocente, y que en ambos casos será la elegida de su único hijo varón.
¿Habrá muchas mujeres de este tipo por el mundo?... Miedo me da la respuesta.
En esta novela la trama de intriga, el interés por descubrir al asesino, relega a un segundo plano la relación amorosa entre nuestros protagonistas, pero no importa, la calidad de los momentos juntos supera con creces la cantidad.
Como siempre La Nora nos enseñará las entrañas de nuestros héroes. Sus fallos, sus inquietudes, inseguridades y fantasmas internos, hasta un punto que parecerá que los conocemos de toda la vida, hemos estado en el interior de ellos.
Cabe destacar de esta autora, las evolución que sufren los personajes, como comienzan siendo una persona, y a medida que avanza la novela son una completamente diferente, más sabia y completa; así como es capaz de crear un entorno romántico y enternecedor, en medio de un ambiente sórdido y tétrico.
Y es qué hijas mías, hablamos de un asesino y violador de menores, un pederasta; una chica que ha sufrido malos tratos en todos los sentidos; n chico al que su madre nunca amó, ni a él ni a su hermana, sólo a la difunta, y me preguntó si fue amor o solo obsesión; y que viven bajo el yugo constante de los reproches. Y aún así cuando nuestros protas se encuentran a la luz de la luna, se nos olvida todo lo demás, y solo podemos pensar en que estrenen la cama nueva, jajajajaja.
Se me olvidaba hablar de los secundario, los que le ponen la nata al pastel, buenísimos todos. Le aportan la chispa al libro, el humor y el buen rollo que hace falta entre tanta tragedia. Sus consejos y sus experiencias nos ayudarán a disfrutar más intensamente esta novela y a verla desde más perspectivas.
-La abuela, su amante, el fontanero, y sus aventuras sexuales.
-La hermana disoluta de Cade. Con dos matrimonios frustrados y una larga lista de conquistas. Su verdadero amor, el veterinario del pueblo, un chico tradicional, pero toda una bestia bajo las sábanas.
-Los tíos de Tory, tan agradables y simpáticos, pero que no permitirán que se rían de su “nene”. Darán lugar a las escenas más cómicas de todo el libro.
En fin, otra de las joyas de Nora, te atrapa desde la primera página y está magistralmente escrito. Como un plato combinado, un poco de amor, suspense, romanticismo y acción.
No me queda sino reconocer que no hay otra como Nora Roberts.
P.D: Sigo repitiéndome, huid de la película, es un consejo de amiga.
Bea, paísajista romántica
